Hay una edad difícil en la que pasamos de la infancia a la adolescencia, para algunos es una etapa larga, para otros demasiado corta como para poder asimilar positivamente los cambios que eso implica. Estoy de acuerdo con J. A. Bayona en que madurar “es darse cuenta de que la vida quizá no sea lo que esperabas, lo que te habría gustado que fuera; que no siempre es justa ni se puede predecir ni la tienes bajo control. Es saber que a veces se gana y a veces se pierde. De un modo crucial, entiendes que se puede ganar y perder al mismo tiempo. Madurar de verdad es aceptar la incertidumbre.”
Madurar es convivir con los monstruos que vienen a vernos. Esta idea de la autora Siobhan Dowd, hubiera sido la línea vertebral de su quinta novela, pero desgraciadamente murió antes de escribirla debido a un cáncer de mama. Inevitable la carga emocional que la historia acarrea. Aquí es donde entra en escena Patrick Ness, que da forma última a todo el trabajo que deja Dowd y consigue crear un relato fascinante, seguramente lo hubiera sido de todos modos, pero trabajar con la presión de poner en marcha algo que no has empezado tú, volcarte en ello, entender cómo debía sentirse Siobhan y más aún, cómo un niño debe vivir semejante situación, y no sólo salir airoso de semejante empresa, sino también exitoso, es sin duda un triunfo absoluto.
El tema no era fácil, este libro habla de maduración, de pasar del mundo de los monstruos infantiles a los reales, porque los hay y muchos (y no estamos hablando de seres fantásticos). Sin embargo, el autor consigue hablar de ello de forma ágil, sencilla, accesible y breve. Le agradezco mucho no haber considerado tonto a sus lectores, por eso sin duda, y porque nos cree capaces de empatizar, supone que todos sabemos de lo que se habla, no se enrolla en largas explicaciones emocionales: este es el sentimiento y esta la reacción que me provoca. Y punto. Sin justificaciones.
Una maduración que en este caso viene obligada por la enfermedad de la madre del protagonista, Conor, que a sus doce años ve tambalearse todo su mundo. Está asustado, su pesadilla no le deja vivir, se va apoderando de él, el monstruo viene a contarle historias que a veces no entiende o no quiere entender, o las entiende mal. Y le presiona para que él también le cuente algo, pero Conor no quiere, no está preparado para contar su historia, la de su madre enferma, la de su padre ausente, la de su abuela, la de su exmejor amiga… Conor tiene muchas cosas dentro, también un monstruo.
A falta de una semana para su estreno en cines, os aseguro que aún estáis a tiempo de leer el libro. Reservoir Books presenta una magnífica y cuidada edición que incluye al final material adicional de J.A. Bayona, Liam Neeson, Sigourney Weaver, Felicity Jones y Lewis MacDougall, director y protagonistas del largometraje. Y aún con más: maravilloso el paso a paso del trabajo llevado a cabo por Jim Kay, el ilustrador. Láminas visualmente muy potentes, tinturas oscuras – la situación lo requiere- perspectivas angulosas y fragmentos de escenas muy seleccionadas y cuidadas. Un trabajo magnífico.
Lo tienes ya disponible en la Biblioteca Miguel de Cervantes con la signatura: J NES mon
Y próximamente en las Biblioteca Lope de Vega y Francisco de Quevedo.