UN FUNERAL DE MUERTE
Me voy de vacaciones y quiero despedirme con un poco de humor. Por eso he elegido para la reseña de esta semana una película del director inglés Frank Oz, del año 2007, enmarcada dentro del género de la comedia negra y que destila humor, humor inglés por los cuatro costados. He de confesar que es quizás la película con la que más me he reído. Te hace sonreír de principio a fin sorprendiéndote con alguna que otra carcajada ante lo absurdo de ciertas situaciones; y nada mejor para el verano y las vacaciones. No es una obra maestra pero sí una delicia.
En esta vida hacer llorar es fácil, lo verdaderamente difícil es hacer reír y eso está solo al alcance de muy pocos. En esta película se logra, y se logra gracias a un guion golfo, desenfadado, muy al modo inglés, con un humor negro que inunda la pantalla. La muerte es lo de menos. Lo de más es estar vivo y tener múltiples problemas, desde el padre dictador de la hija madura al hermano pasado y vividor preocupado por una mancha en la muñeca y que ve como sinónimo de muerte. En este funeral la muerte es lo de menos. Lo que importa son los vivos, los que se quedan aquí afrontando sus problemas.
Es una película coral en la que cada personaje tiene su parte importante en el todo y eso es un acierto a mi modo de ver.
Romance, celos, parientes políticos, drogas psicodélicas, recelos familiares, secretos comprometedores y un insólito chantaje, transforman el digno ritual de despedida de un venerable padre de familia británico en el más completo caos con situaciones de lo más disparatadas.
Con un elenco que reúne a la flor y nata de la comedia británica, el film, ganador de los premios del público de los Festivales de Locarno, de Aspen y U.S. Arts Comedy, indaga con traviesa curiosidad en lo que sucede cuando una familia típicamente dividida se ve obligada a reunirse, y sale a la luz todo lo que se había ocultado hasta ese momento.
En la mañana del entierro del patriarca, los familiares y allegados del difunto llegan a la ceremonia cargados con sus propias preocupaciones. Daniel (Matthew Macfadyen), uno de los hijos, sabe que tendrá que enfrentarse con su insoportable hermano, el famoso novelista Robert (Rupert Graves), recién llegado de Nueva York. Sin olvidar las promesas que le ha hecho a su mujer, Jane (Keely Hawes), de empezar una nueva vida.
Mientras tanto, Martha (Daisy Donovan), la prima de Daniel y su nuevo y muy formal novio, Simon (Alan Tudyk), están desesperados por caerle bien al altivo padre de ella. Pero el plan que se descalabra porque accidentalmente, camino al funeral, Simon toma una droga de diseño que lo transforma en un loco que experimenta rachas incontrolables de delirio y desnudez, frente a sus potenciales suegros.
Pero lo peor sucederá cuando aparezca un misterioso invitado (Peter Dinklage) quien amenaza con revelar un trascendental secreto familiar.
El descontrol y los incidentes desgraciados se suceden, mientras que los dos hermanos tratan de evitar que la familia y los amigos se enteren del secreto, e intentan encontrar una fórmula que les permita, no sólo enterrar a su amado padre, sino también, con él, al secreto que tan celosamente guardó.
Con un humor ácido como no es habitual ver en la gran pantalla, “Un funeral de muerte” es una comedia de equivocaciones, en donde ni el sacerdote encargado de la ceremonia se salva de cometer alguna que otra aberración.
“Un funeral de muerte” es una apología en contra de la normalidad, de la formalidad, de las apariencias etc. cuando son utilizadas de forma inútil. Aquí son totalmente pervertidas con oscuros secretos, dobles vidas y caracteres desconocidos.
Dentro de todo este humor negro Oz reflexiona sobre los convencionalismos, el poder de las apariencias y su inutilidad, los prejuicios y cómo la defensa de lo supuestamente correcto es absurda, sobre todo cuando por su protección se acaban haciendo auténticas burradas bastante más censurables. Ideas básicas muy bien tratadas y desarrolladas que permiten pasar un rato tremendamente divertido.
Si buscas una comedia actual, con esta seguro pasarás un buen rato. Si no te ríes en algún momento seguramente tendrás una depresión grave…
En resumen, hilarante y desternillante. Una buena propuesta para una estupenda noche de verano. Y lo mejor de todo, como siempre es que podéis encontrarla en nuestras bibliotecas DVD PE 3588 (Biblioteca Miguel de Cervantes), DVD PE 689, 1637 (Biblioteca Lope de Vega), DVD PE 2996 (Biblioteca Francisco de Quevedo).